[MÚSICA] En este vídeo os voy a comentar algunos de los abusos que cometen los intermediarios financieros, y realmente yo creo que este es un tema que está muy de moda, desgraciadamente, porque se presentan muchísimas quejas, incluso, los propios intermediarios son conscientes que tienen que mejorar su imagen delante de los clientes. Les voy a comentar una anécdota, hace pocos días estaba hablando con la responsable de recursos humanos de un importante banco español, y me comentaba que las entrevistas finales para elegir candidatos, una de las preguntas que les hacen entre otras muchas es ¿qué opinión tienen ellos de los intermediarios financieros? Y lo que espera del candidato es que realmente sean críticos. Seguramente si un candidato en plan pelota dijera, son extraordinarios como funcionan, sería descartado. Ellos son conscientes que deben mejorar la forma en que se comunican, que deben mejorar la transparencia en cuanto a las cláusulas que aplican. Entonces, la respuesta que esperan del candidato es que sin que diga que son un desastre total, pero que presente argumentos críticos y demuestre que está informado de cómo está funcionando el mercado y de los problemas que tienen este tipo de entidades. ¿Por qué es fácil que se produzcan abusos en este tipo de productos? Básicamente en esencia, los productos financieros son intangibles, no los podemos tocar, no podemos ver características físicas. De hecho, para saber cómo funcionan nos tenemos que leer un contrato que a lo mejor tiene ocho, 10, 12 páginas. Además, los contratos cada vez son más sofisticados, no tienen unas características observables como un producto físico, y además presentan complejidades que antiguamente hace unos años no se presentaban. Es decir, el producto dará unos resultados en base a otras variables económicas que puedan modificarse. Es difícil comprenderlo para personas que no están avezadas en el campo de la economía. Os voy a poner un ejemplo, cualquier persona aunque no sea mecánico, aunque no sea ingeniero de automoción, mínimamente sabe cómo funciona un coche. Algunos sabrán algunos intríngulis más concretos, pero sí sabe cómo funciona. En cambio, un contrato financiero de opciones, un contrato de futuro, un préstamo en divisas, en general, no podemos decir que todo el mundo pueda saber cómo funciona de entrada. Los abusos financieros se pueden producir a tres tipos de niveles. El inicial sería en la fase de venta del producto. Básicamente, en la fase de venta nos podemos encontrar falta de idoneidad, es decir, te están vendiendo un producto que no es exactamente el que necesitas, y falta de comprensión, no entiendes, o no te quieren explicar determinadas características del producto, luego volveremos sobre esto. Luego, la fase de la gestión del producto, el producto dura un plazo en el tiempo. Se pueden producir abusos por una mala praxis, una mala gestión de cumplir las órdenes o de informarte de lo que está pasando con ese producto. Y por último, un tema importante es que cada vez más los intermediarios financieros aparte de vender sus productos prestan una serie de servicios, entonces, ahí se suelen producir abusos básicamente por cobro de comisiones inadecuadas o abusivas. Realmente, en el producto financiero el interés es un precio que se cobra o que se paga según sea el producto, En un servicio lo que cobra el intermediario es una comisión como otro intermediario que te vende o te asesora de producto. Una reflexión primordial, el primer aspecto a considerar de parte de un producto, sea financiero o sea cual sea el producto, no contratar, no comprar una cosa que no entendamos y que cuando vayamos a firmar el contrato, cosa que a veces no lo hacemos, no lo vemos en profundidad, lo que hay escrito no coincide exactamente con lo que nos ha explicado el vendedor o comercializador del producto. Esas dos premisas son fundamentales, aquello que no entiendes, no lo compres, y aquello que te han dicho que te interesa y te han convencido para que compres, cuando te presenten el contrato entretente en volver a leerlo, y si hay algo que no entiendes, comentar, ¿por qué usted me dijo esto verbalmente y ahora realmente aquí pone una cosa que no es exactamente lo mismo o que yo no entiendo así? Vamos a hablar del tema de idoneidad. Falta de idoneidad, a veces el cliente necesita un producto pero ese producto puede tener varios niveles de complejidad, y entonces aunque se le vende no se adapta exactamente a su perfil, puede ser que exista un producto mejor, puede ser que ese producto realmente no le interesa. No importa que a veces [INCOMPRENSIBLE] no tienen por qué ser por mala fe, pueden ser por ignorancia A lo mejor el vendedor piensa que necesita un determinado nivel de producto, y con un producto más sencillo, o con menos complejo, tendríamos suficiente. Voy a poneros un ejemplo que se ha producido y que ha tenido consecuencias para bastantes ciudadanos bastante negativas, como que los tipos de interés en los distintos países son distintos, pues cuando una persona compra una vivienda y pide una hipoteca, una solución cuando los tipos de interés de tu país son altos, pues pedir la hipoteca en la divisa de otro país que tiene un tipo de interés más bajo. Entonces, eso en principio podría ser ventajoso, pero incluye o incorpora un riesgo que muchas veces no reconoce, que es el riesgo de divisa. Voy a poner un ejemplo, una persona que vive en un país, en España, un país en Europa que funciona con Euros, pues, se han conseguido hipotecas en Francos suizos, ¿por qué? Porque el tipo de interés que en ese momento se estaba aplicando en Suiza era mucho más bajo. pero eso a la larga, ese producto, si no hay un seguro contra el riesgo de divisas, pues es un producto que no es idóneo porque le falta una pata coja. Habéis de saber que durante un tiempo, políticamente, por una decisión política, no por una decisión económica, las autoridades suizas decidieron que el Franco Suizo tenía que valer lo mismo que un Euro, pero eso es político, es artificial. ¿Qué ha ocurrido? Para defender el Franco Suizo, se iba preciando respecto al Euro, y para defender esto, lo que hacían la sociedades suizas era vender Francos Suizos contra Euros. Llegó un momento que al gobierno suizo esto le parecía muy caro, y decidió, de hoy para mañana, que no lo hacía más, y de hoy para mañana hubo una depreciación del Euro contra el Franco Suizo de un 15%, pues las personas, españoles, por ejemplo, que tenían una hipoteca en Francos Suizos, al mes siguiente, para repagar los Francos Suizos, tenían que aportar un 15% más de dinero, una barbaridad, pero es que además, si querían cancelar el préstamo, el préstamo se había encarecido un 15%, lo cual [INCOMPRENSIBLE] como una falta de idoneidad total que no sabemos si es por ignorancia o por mala fe, igual el empleado del banco tampoco sabía que podía ocurrir este problema, de hecho en España se ha creado la plataforma de afectados por la hipoteca multidivisa, con divisas distintas. Otro tema importante es la posibilidad de falta de comprensión del cliente, es decir, en este caso, en el caso anterior de la hipoteca multidivisa, pues no se le había asesorado al cliente del riesgo que podía tener, pero es que aunque te lo indiquen, en ocasiones el producto es tan complejo que te es imposible valorar los distintos resultados que se pueden producir. A mí you me ha pasado, el caso concreto de llegar a una entidad financiera, y dicen: Tengo un producto que te puede dar un determinado interés, pero mira, interés dependerá que de aquí a seis meses esta acción suba, y esta suba, y esta suba, y si baja sólo se tendrá en cuenta". Y digo: Escucha, yo soy economista y no entiendo, ¿tú entiendes realmente el producto que me estás vendiendo? Ocurre con frecuencia que es un producto que realmente para entenderlo tendrías que pasarte una tarde analizándolo y finalmente no lo comprarías. A veces pasa que realmente el producto es que no lo necesitas. Sí hay que tener en cuenta el problema este de la idoneidad, de la falta de comprensión, de si realmente lo necesitas. Yo les voy a poner un ejemplo. Hay productos que están pensados para otra cosa, y al final los acaban vendiendo como churros y el título vende. Por ejemplo en España hay un contrato interesante que es el contrato del valor de futuro sobre las naranjas, ¿por qué? Porque España es un país gran productor de naranjas y porque exporta. Entonces, el contrato de futuro sobre naranjas que se negocia en la bolsa de Valencia, es muy útil para los productores y exportadores de naranjas porque para ellos funciona como un seguro, pero no hay nada que me prohíba a mí comprar un contrato de futuros sobre naranjas, entonces, lo que para los productores de naranjas es un seguro que es súper útil, para mí sería puramente un producto especulativo, es como si yo estuviera apostando, en realidad sería una apuesta, a que el precio de la naranja sube o el precio de la naranja baja, luego en este caso concreto realmente este producto no tendría, tiene otra función y no tendríamos que contratarlo salvo que lo utilizáramos porque somos el productor de ese producto. Como consecuencia de los abusos financieros que se han producido, you en Europa desde los años 90 se ha creado una directiva, la MIFID, que es el acrónimo en inglés, que entró en vigor en España bastante tarde, entró en vigor, creo no sé el año que inició en Europa, finales de los 90, pero en España se empezó a utilizar en diciembre de 2007. ¿Qué ocurre? Que muchas personas tienen contratos anteriores a esta fecha, y realmente ahora están surgiendo los problemas, porque a veces ocurre que tienes un contrato de una hipoteca que dura 20 o 30 años, y a lo mejor los primeros años no surge ningún problema porque los tipos de interés apenas suben, pero luego suben o bajan mucho, y al cabo de cinco, siete o 10 años se presenta una reclamación porque uno no pensaba que tenía que pagar una cuota tan elevada. Esta directiva que es bastante extensa clasifica, lo bueno que tiene es que clasifica a los clientes que hacen contratos financieros en varios niveles, las contrapartes, que son los creadores de mercado, los clientes profesionales, y atención, donde podríamos estar nosotros, los clientes minoristas, y ocurre que te exige que has de pasar un test de idoneidad, cuando tú abres un contrato con una entidad financiera, como vas a poder operar en distintos productos, te pasan un test de idoneidad y te preguntan ¿usted sabe lo que son las acciones? ¿Usted sabe qué puede perder con este contrato? Etcétera, etcétera, etcétera, pero hay muchos contratos financieros en vigor en España que aún no corresponden a la época en la que se pasaban estos tests de idoneidad. Simplemente esto se hace para saber si el cliente puede entender ese producto, le puede ser útil, y también sirve para clasificar el riesgo de cada producto. ¿Qué ocurre? Primero, que en España la normativa llegó tarde, de hecho ahora sí que cualquier entidad financiera que abres una cuenta te lo pasan, pero antiguamente no era así, y ocurre que estamos hablando de productos que venden los intermediaros financieros que hay de muchas clases. La normativa MIFIT, por lo menos aquí en Europa es incompleta. ¿Por qué? Porque cubre los productos bancarios pero no cubre los productos de seguros que también tienen riesgos, o por ejemplo los productos de planes de pensiones que pueden invertir en renta variable. Luego, en principio, también haría falta que esta normativa, ese paraguas de protección se fuera ampliando a otros ámbitos como el de los seguros y planes de pensiones.